El pasado 6 de Diciembre, memoria de San Nicolás de Bari, tres de nuestros monjes fueron ordenados sacerdotes, junto a otros tres compañeros más, en la ciudad de San Rafael, Argentina, por manos de Mons. Eduardo M. Taussig, obispo de la misma ciudad.
Dichos monjes son los neos-sacerdotes Ignacio Berreta, Javier Ansaldi y José I. Berarducci, que desde hace ya unos meses forman parte de la comunidad monástica del monasterio de “El Pueyo”, España, perteneciente al Instituto del Verbo Encarnado.
Durante toda la semana que siguió a la ordenación, cada uno de los neos-sacerdotes pudo celebrar su primera Santa Misa junto a sus familiares y amigos. Es costumbre de hecho, en nuestra Congregación, que todos los recién ordenados viajen juntos a sus ciudades natales y celebren por primera vez la Santa Misa en sus parroquias de origen. Es un hermoso modo de agradecer a todos aquellos más allegados que los fueron ayudando, ya desde la niñez, en su camino hacia el sacerdocio.
El sacerdote hace la Eucaristía y la Eucaristía hace al buen sacerdote. Agradecemos a Dios por la gracia que nos concede de tener cada año otros nuevos sacerdotes y le pedimos, por intercesión de la Virgen María, Madre de los sacerdotes, que no deje bendecirnos con muchos y santos sacerdotes.