La sorpresa fue verdaderamente grande cuando, abriendo la ventana de la celda, nuestros ojos se topaban con el blancor que recubría todo, ¡había nevado! El monte, silencioso y tranquilo más que de costumbre, estaba revestido … Read More
La sorpresa fue verdaderamente grande cuando, abriendo la ventana de la celda, nuestros ojos se topaban con el blancor que recubría todo, ¡había nevado! El monte, silencioso y tranquilo más que de costumbre, estaba revestido … Read More